Carta postal de 1948
Mariquita en Tanti ,
a mi madre
La niña de este papel antiguo
que envejeció con ella
y ahora le sobrevive
va vestida con delantal bordado,
parece una muchachita anhelante
y enigmàtica de un cuento de Chèjov.
La luz le viene de lo alto
danzante y se hace sombras
en la mirada oscura,
allí donde aún la soledad
no tiene nombres ni rupturas.
Está ligeramente hacia adelante,
cuerpo de mimbre claroscuro
en el arrobo del instante capturado.
Ella es libre,
libre porque es recién casada
pero no aprendió esos papeles todavía
y tiene los labios hinchados
como quien ha besado largamente
y ahora representa su rol convencional.
Esa sonrisa parece decir que es bienamada y digna,
hacia abajo las manos cortas y fuertes
con uñas al ras,
sus blandas manos secas
y en el medio la línea de la vida.
Tan marcado todo por venas azuladas,
tan azuladas…
Hay allì flores, niños, animales,
responsabilidad , solicitud, debilidad
y alguna vez ternura
y siempre el deber y el abandono.
Las fotos se hacen a sì mismas
mientras les falta lo que pasa
y queda de una vida ,
esa otra mitad fundamental,
después, por un resquicio
vemos sonrisas que el tiempo
ya ha borrado,
señales,
miradas imposibles de devolver.
En el Pireo
La pasión por lo imposible
construye lo posible,
no hay nada que perder,
si no se llega nunca.
En tiempos de destierro
Eurípides, escribió “Las vacantes”,
en Macedonia el juego con los dioses
ha terminado,
adoración y blasfemia
se unifican.
La aurora está en todas partes,
aún en la ciudad oscura
del Oriente
se percibe el madrigal del alba,
la locura es dulce al terminar la noche
y el amor duele menos.
Ataraxia, ataraxia
nadie sabe quien es
el extranjero.
Juegos
En el interior de este juego
siempre seré el mismo
como un ojo de cristal
cautivo en su mirada fija.
Las formas que modelo
son arena en el viento,
aire que cruza el espino
salvaje y dulce.
Hay juegos que salvan el mundo
como lo hace un niño
sin ningún esfuerzo
vivir es un momento
sin agonía
que hay que imaginar eterno.
Creas o no creas
mientras sucede todo…
Así borro las huellas
que me llevan a otra parte
como un aleteo de mariposa,
perdido y descalzo
sin soledad alguna.
Hèctor Berenguer, naciò en Rosario, Santa Fe, Argentina, en 1948. Durante la dècada del 60 incursionò en distintas revistas y publicaciones, "Grupo Literario 5" , "Runa" , entre otras.
Ha colaborado con periódicos y revistas especializados, de los cuales han sido recopilados textos de investigaciòn sobre poesìa china con el nombre "Tinta china" y consideraciones sobre la poesía "El poeta sofista".
De su producción reciente en antologías: "Café con letras" (EDITORIAL MUNICIPAL DE ROSARIO), "Poetas de Rosario: Desde la otra orilla" (EDITORIAL GRANADA LITERARIA, POESÍA, AYUNTAMIENTO DE GRANADA 2004), entre otras.
"Marcas de agua" (poesía, EDITORIAL LA CACHIMBA, ROSARIO, ARGENTINA, 2001) , "Entre la nada y el asombro" (poesía) es su último libro editado.
Como gestor cultural ha desarrollado una amplia tarea entre las cuales caben destacar: hermanamiento poético Granada/Rosario (con el poeta granadino Pedro Enríquez), coordina el ciclo "Poesía en el Círculo" en el Teatro El Círculo de la ciudad de Rosario ( www.teatroelcirculo.com.ar ), desde hace diez años y de la denominada Semana de las Letras y La lectura , encuentro internacional y nacional de poesía. http://semanadeletrasylectura.blogspot.com